miércoles, 30 de mayo de 2012


Comunicación para el II° Congreso
 de Folklore de las Comunidades Autonomas. 
Murcia 1986.


 Indumentaria: Generalidades, problemas y fuentes para su estudio.

 

 Vicent Ferrandis Mas.


Se trata de una comunicación para ser leída en el II Congreso de Folklore de las Comunidades Autónomas, celebrado en Murcia En el año 1986. 

De este Congreso, se esperaba que fuese una continuación del desaparecido y más acreditado Congreso Nacional de Artes y Costumbres Populares de la lnstítucíón Fernando el Católico del Consejo Superior de Investigaciones Cientificas. La realidad fue que aunque el congreso fue un éxito de asistencia y todos salimos de el satisfechos y con expectativas de continuidad, ninguna Comunidad Autónoma recogió el testigo para organizarlo al año siguiente.

Las actas jamás se publicaron y los trabajos escritos debieron ir a parar a la basura, o tal vez   estén en algún lugar de la Consejeria de Cultura de la Comunidad Murciana.

La concurrencia fue numerosa y bastante acreditada. notable fue la participación del C.S.I.C con varios representantes de la Revista de Dialectologia y Tradiciones Populares y la clausura por D. Julio Caro Baroja.

Sobre mi comunicación. debo decir que siguiendo mi costumbre y en esta ocasión de manera totalrnente premeditada, a pesar de que supuestamente deberia de haberla leído, no lo hice así. Pensé que era una lastima estar leyendo algo que después cualquiera de los asistentes podria leer con detenimiento cuando se publicasen las actas y opté por smplernente improvisar sobre el tema, remarcando la parte dedicada a las fuentes y describiendo el proceso posterior a la obtención de datos.

Una segunda parte la dedique a describir el estado de las investigaciones hasta ese momento, haciendo un poco de historia de cómo el estudio de los Inventarios Reales estudiados por José Ferrandis y después otros estudiados por Carmen Bernís, allá por los años 40, habian abierto un camino que no se habia continuado. Por mi parte, yo tenia en mi archivo familiar algunas cartas de dote y testamentos, con lo que conocia desde años la posibilidad de su estudio, aunque no la habia iniciado de manera sistemática.

Ya fue al comentar con Francisco Zanón, cuando decidimos hacerlo e incluso nos repartimos un poco las áreas geográficas, para no interferimos sacando datos que podrian llevamos a duplicidad de resultados. De esta manera incluso diseñamos unas fichas para anotar los datos. De estas fichas también hable en la comunicación. Digamos que una tercera parte la dedique a intentar convencer a los asistentes que pudiesen estar interesados en el tema de la Indumentaria Tradiciónal, de la necesidad de realizar trabajos similares al mío, para que de alguna manera se pudiesen ir rellenando esas lagunas que aparecían en todo el territorio español. Les hable especialmente de separar los datos obtenidos por comarcas, de diferenciar especialmente a los labradores de los menestrales de las ciudades y a ambos de la nobleza.

Finalizada mi exposición, me sentí verdaderamente satisfecho, ya que a la salida de la sala me estaban esperando Concha Casado y Antonio Cea, que por entonces formaban parte del equipo de Julio Caro Baroja, para interesarse por mi trabaio y ofrecerme por si queria colaborar en su equipo. Posteriormente el propio D. Julio, sabiendo que yo habia estado por Madrid, investigando la obra de Larruga, me indicó que el habia tenido noticia de que la parte no publicada, estaba manuscrita en el Ministerio de Hacienda, aunque no sabia donde.

Para mi fue memorable la gran aceptación genera1 de mi trabajo por parte de los asistentes, especialmente de algunos murcianos con los que entablé una verdadera y perecera amistad que aun mantengo y que creo que durara toda mi vida. Ellos eran los recién salidos del Grupo de la Seda y que habian formado el grupo del Rento de Alberca de las Torres.

Hoy me siento satisfecho, pues veo que aunque la cosa no haya sido masiva, si que ha tenido una cierta repercusión. Otras personas han hecho trabajos en esta linea y algunos circulos han aprovechado las dotes, inventarios de bienes y testamentos para estudios de tipo económico y comercial, como es el caso del circulo de los profesores Yun Casalilla y Torras Elias.

COMUNICACIÓN.

Como sucede con casi todas las ciencias, tradiciones y artesanías con una raíz marcadamente popular, la indumentaria está completamente arrinconada en la mayoría de los países, salvo excepciones como Inglaterra y Francia. En el territorio español, se encuentra en gran falta tanto de estudios como de estudiosos, hecho mas agravado aún por el motivo de no conocerse y mantener relación entre los pocos que a esto dedican sus esfuerzos.

El campo de investigación de esta ciencia-tradición-arte popular que es la indumentaria, es considerable, y seria necesario y preciso el establecer las causas complejas de su formación, utilización, evolución; difusión de las modas y corrientes; penetración y asentamiento de las modas; difusión y penetración de las artes relacionadas con la indumentaria, como son: los tejidos, los tintes, la orfebrería, la sastrería, el calzado y otras menores como bordados, encajes, cintas, peinados, etc.

Es muy cierto que la indumentaria española está realmente necesitada de estudios documentados que permitan conocer todos estos pormenores antes mencionados, y que la única manera de conseguir tal cosa es investigando y profundizando en las fuentes locales, a fin de conocer todas sus particularidades. Una vez conocidas las particularidades de tipo local, se puede iniciar fácilmente el estudio comparado del traje a niveles intermedios, tales como podrían ser las antiguas comunidades con leyes y ordenanzas propias como los antiguos reinos   de Castilla-León, Aragón, Valencia, Murcia, Granada, Jaén, Señorío de Vizcaya, Cataluña, y otros. Esto permitiría en un, paso posterior establecer con cierta exactitud la historia del traje español.

En primer lugar habría que hacer unas consideraciones elementales sobre el vestido y su evolución. Así pues, necesario será que nos hagamos nosotros mismos unas preguntas: ¿Es el vestido el resultado de unas exigencias naturales?, o por el contrario ¿Corresponde a las necesidades de ideas mágicas o religiosas? Pienso que las dos razones son muy válidas, la primera lo es esencialmente para las regiones de clima frío, en las que el cuerpo humano necesita de cierta protección contra las inclemencias del clima; en estas regiones el abrigo proporcionado por la piel de un animal, debió de ser considerado como algo de grandísima utilidad y de necesidad a partir de este momento.

A la segunda pregunta, creo que responde el hecho de que sociedades primitivas que viven durante todo el año en completa desnudez, en las ocasiones de marcado aspecto religioso, sienten el deseo de vestirse, eso si con vestidos que no tienen como función principal el abrigo, y sí con elementos de vivo colorido o de significación mágica como, plumas de determinados pájaros, o pieles de determinados animales, o incluso con hojas de ciertos árboles.

Mas tarde, en una segunda etapa, el vestido pudo tener otras razones de importancia como distinción del poder o de obligación religiosa; motivaciones que, entre ellas, podrían estar estrechamente relacionadas. A la pregunta de si ¿el traje es una manifestación de poder? se podría contestar afirmativamente sin dudas, así como que al final de la escala social lo es de   sumisión.

En el traje, se manifiestan todos los síntomas de poder: la casta, la riqueza, la dignidad política, la dignidad religiosa, la dignidad profesional, la dignidad militar, etc. Esto se advierte principalmente en los tejidos ornamentados con elementos de gran coste para los trajes civiles; en el traje religioso ciertos atributos tradicionales que indican la representación o delegación divina sobre la tierra; y en el traje militar se advierte en los elementos o invenciones destinadas a la protección del cuerpo en la lucha y a asustar con la sola presencia al contrario, engalanándolo de manera que dé al usuario un aspecto aterrador.

Como hemos dicho, en el otro extremo de la escala social, el traje es una manifestación de la sumisión, cosa que podemos advertir claramente en las uniformidades. Así pues, tenemos que las antiguas pragmáticas reales limitaban a las clases sociales mas bajas a vestir de manera y con tejidos previamente determinados por las clases dirigentes. En la actualidad se puede ver aún en algunos regimenes dictatoriales y totalitarios como en la China de Mao o en la misma Rusia; en los uniformes militares sin atributos; en los uniformes de los obreros de muchas empresas; en los de los colegiales y en los de las órdenes religiosas.

En una etapa ya más moderna, la razón del vestido ha evolucionado a un motivo sencillo y muy importante, que es el de la sensación de gustar. No obstante, este motivo a pesar de ser sencillo, no es tan simple, ya que no ha conseguido desligarse de los demás: protección ante el clima, manifestación del poder, aunque si parecen haber perdido importancia las razones religiosas o mágicas.

Considero también importante dar al congresista algunas indicaciones sobre las líneas generales de la evolución del traje. Este, a través de sus muchos milenios de historia, ha tenido unas pocas líneas maestras por las que se ha regido, las cuales podríamos clasificar; en dos grupos, el primero reúne a cinco modelos diferenciados principalmente por sus formas, y el segundo a tres modelos que mas bien se diferencian cronológicamente.

En el primer grupo encontramos: EL TRAJE FLOTANTE, que consiste en arrollar alrededor del cuerpo un pedazo de tejido sin forma determinada, este modelo lo encontramos aún entre los moradores de islas del Pacífico, o entre tribus africanas.

EL TRAJE ENCAJADO, que consiste también en un trozo de tejido con agujero central por el que se saca la cabeza y queda entonces el dicho trozo, descansando sobre los hombros, caso del que es representante actual el poncho sudamericano y que en España durante: la Edad Media era el capotillo de dos haldas.

EL TRAJE COSIDO Y CERRADO, que es parecido al anterior pero con las modificaciones que representan el tener ya hechuras mas amoldadas al cuerpo y que hacen aparición las mangas; el caso mas representativo, serian las camisas tradicionales sin canesú.

EL TRAJE ABIERTO, consiste en tener las prendas abiertas por su parte delantera, descansa sobre los hombros y se puede ceñir con algún cinturón; de este tipo teníamos durante el Renacimiento los ropones y las capas con maneras tan características de esta época en España.

EL TRAJE AJUSTADO, GUANTE o MODERNO, que comenzó a hacer tímidas apariciones durante el siglo XIII para implantarse definitivamente durante el siglo siguiente; éste consiste en prendas independientes para tronco y piernas, ajustándose al máximo a las formas del cuerpo humano.

Todos estos cinco tipos no los podemos situar claramente de una manera cronológica y realmente no se han sucedido el uno al otro, sino que se superponen durante todas las épocas pero en lugares distintos. El segundo de estos dos grandes grupos, si es mas claramente cronológico, aunque tampoco lo es de manera completa, y representa distintas fases.

En primer lugar tendríamos EL TRAJE LARGO, que con gran diversidad de modelos se mantuvo en vigencia hasta el siglo IV. En segundo lugar, EL TRAJE CORTADO POR LA CINTURA, fase en la que aparecen gran diversidad de formas y prendas todas ellas destinadas por lo general a cubrir de manera independiente el cuerpo y las extremidades inferiores; comienza a hacer su aparición durante el siglo XIII y podríamos decir que finaliza durante el XIX.

Finalmente la última fase a la que preferimos no poner ningún nombre, pero que se caracteriza por la aparición constante de nuevas formas y modelos que se adaptan rápidamente a la corriente de la moda; característica importante de esta última fase es que el vestido pierde toda su personalidad y se convierte en internacional, a causa de la importantísima mecanización que se produce en el sector de la confección, cuyos sastres han quedado limitados para hacer vestidos para grandes solemnidades o de capricho.

Pasemos a hablar ahora de los problemas concretos que se le plantean al investigador indumentarista; en principio, la cronología en la historia del traje es bastante conflictiva, pues sucede a menudo que las prendas del vestido pueden tener varios cambios sucesivos en cuanto a su forma y en cambio permanecer invariable su nombre. Así pues, actualmente, no se puede establecer un orden cronológico exacto de la utilización de las prendas del vestido.

Algo que tiene que tener muy presente el indumentarista son los factores principales que influyen sobre la indumentaria local o comarcal. Estos factores podríamos decir que principalmente son tres: el clima, la tradición,  
el comercio y las materias primas disponibles para la confección del vestido.

El clima es factor decisivo en cuanto al grosor de las prendas y tejidos, así como a la cantidad de las prendas que se superponen sobre otras e incluso determina en buena parte los gustos por los colores.

La tradición es, por supuesto, un factor importantísimo, ya que sobretodo en los medios rurales las personas son poco dadas a las innovaciones y mucho al respeto profundo por lo tradicional que, representa para ellos la continuidad de las creencias religiosas y tribales; este factor, debe ser uno de los que el investigador indumentarista que intente desarrollar su trabajo sobre indumentaria tradicional, debe dar máxima importancia, ya que frecuentemente se han hecho grandes montajes de tipo nacionalista sobre los llamados TRAJES TIPICOS REGIONALES con elementos que no han tenido nunca ninguna tradición.

Los trajes típicos españoles, están en un estado lamentable de deterioro, citemos como ejemplo el que hoy se considera como representativo de Andalucía; vemos hoya la mujer andaluza vestir la mayoría de las veces con un traje construido de una sola pieza, de tela moteada, y cargado de volantes, con aderezos y collares de plástico de colores, cuando estos elementos no se han llevado tal vez nunca en algunas partes de Andalucía y en las que se ha hecho ha sido solo durante un corto periodo de tiempo, además con el agravante de ser muy próximo a nosotros.

El tercer factor que el indumentarista deberá observar, y que se manifiesta poderosamente sobre el vestido, es la materia prima disponible. Podemos ver con facilidad que en zonas de gran producción de lino, la mayoría de la ropa allí confeccionada es de esta fibra; otro tanto sucede con la lana, la seda o el algodón.

También observamos que precisamente en los puntos de producción de la materia prima, se suelen utilizar para consumo propio las calidades mas bajas de dicha fibra. Puedo poner como ejemplo el caso de Valencia por ser el más estudiado por mí; entre los labradores de la Huerta de Valencia, en las prendas confeccionadas con sedas, en un 80% se uti1izan el hiladillo o el aldúcar que son calidades de seda muy bajas y que incluso en muchos casos están proscritos por el Colegio del Arte Mayor de la Seda, que no permite fabricarlos a sus maestros, a los que impone fuertes sanciones y la quema de las telas encontradas en sus talleres.

Así pues, diremos que la producción valenciana de sedas finas era destinada a la exportación y que las de baja calidad se vendían casi exc1usivamente en Valencia y eran los tejidos hechos solo con hiladillo, generalmente de producción casera, los que se consumían usualmente en la misma población que había criado el gusano de seda y que después había hilado, devanado, torcido y tejido la dicha fibra.

Para el investigador indumentarista uno de los principales problemas que obstaculizan su labor, es el vocabulario empleado para el traje, éste se complica de manera extraordinaria por dos motivos esenciales que son la variedad y la movilidad. Ciertas prendas de vestir, cambian de nombre de una época a otra, como ejemplo tenemos la camisa que en sus primeros tiempos recibió el nombre de alcandora. También ocurre el caso opuesto en el que prevalece el nombre y cambia la prenda a que designa, como ocurre con el jubón, que en principio designaba a una prenda masculina, mas tarde pasó a serlo de los dos sexos y finalmente, se convirtió en una prenda exclusivamente femenina.

Con los tejidos ocurre otro tanto, tenemos como ejemplo la palabra batista, que en un principio designaba a un lienzo de lino fabricado por un tal Juan Bautista en la ciudad de Cambray en Francia, y que mas tarde ha pasado a designar a un tejido fino de algodón; o como con la palabra Olanda u Holanda que lo mismo podía designar a un lienzo muy fino de lino, que a una variedad de terciopelo fabricado en Valencia a imitación de los terciopelos holandeses.

Otro problema importantísimo son los nombres que designan a tejidos o prendas que para el investigador son completamente desconocidas y que retrasan constantemente la tarea. Por esto creo imprescindible la publicación de cuantos glosarios a todos los niveles (local, comarcal, etc.) se puedan, con intención de confeccionar, posteriormente, un diccionario exclusivo de términos relacionados con el traje (tarea que por mi parte ya he iniciado).

Aunque mi intención es dedicar mis investigaciones a la indumentaria en general, siempre será para mi apartado importante la indumentaria Tradicional popular e histórica. Cuando hablamos de indumentaria tradicional popular histórica, siempre tenemos que tener claros varios conceptos que son esenciales para poder desarrollar el asunto tal como lo hemos titulado.

En primer lugar, tenemos la palabra popular, su significado es muy simple, seria la indumentaria utilizada por la mayoría, que viene a coincidir con la clase social del pueblo llano, formada por labradores y oficios que hoy llamamos artesanales. Por supuesto excluye a la nobleza, el clero y el ejército; que además de alguna manera vestían de manera uniformada y diferente.

En segundo lugar tendríamos otra palabra, cuyo sentido ya entraña cierta complejidad, esta es tradicional. Su significado dentro de la indumentaria, nos lleva a pensar que es la empleada durante varias generaciones; que establece unas costumbres y que por tanto fija unas características del grupo que la utiliza. Debemos tener pues muy en cuenta, que debe ser utilizada por varias generaciones, ya que al hecho de utilizarse durante un corto periodo de tiempo debemos llamarle moda.

El concepto llamado moda, que todos conocemos y sabemos como actúa, por un lado, influye sobre lo popular, es contrapuesto a lo tradicional, pero siempre se cuela y termina modificando lo tradicional. La moda, casi siempre procede de la clase alta, que en la indumentaria es la que tiene los posibles económicos para poder afrontar cambios constantes que le permiten diferenciarse de las clases populares. Los humildes, siempre reían y criticaban las extravagancias de los modernos, pero a la vez los admiraban y terminaban imitándoles, lo que en realidad era un intento de acercarse a ellos.

Mi línea de investigación, siempre ha sido el estudio del documento fisico, poca credibilidad he dado siempre al llamado trabajo de campo mediante interrogatorio a personas mayores. En muchas ocasiones, he advertido que existían contradicciones, o incluso inventaban sobre algo que les habían dicho con anterioridad otra persona.

En esta comunicación mi principal objetivo es el dar a conocer unas líneas de investigación, que a mi me parecen las mas correctas y que están basadas principalmente en documentos de archivo.

Hasta este momento, no me consta que se hayan estudiado las carta dótales por ningún indumentarista, salvo por Carmen Bernís que estudió unos pocos documentos del siglo XVI. En cambio si se han estudiado los inventarios reales, pero dando la misma importancia que al resto de bienes muebles. Estos trabajos fueron realizados por José Ferrandis Torres y Eduardo González Hutervise.

Es necesario pues que los estudios sobre indumentaria, especialmente la popular, se hagan de manera generalizada y se puedan dar a conocer mediante su publicación, para que los grupos folklóricos lleguen a vestir con cierto rigor científico.

Pero pasemos ya describir las fuentes de las que el investigador indumentarista obtendrá los datos fiables sobre los que documentar su investigación.

1°.  LAS CARTAS DOTALES. Documento que se suele conocer por cartas dótales, matrimoniales, de boda o simplemente dote. Consiste en una relación de las prendas que aporta la mujer al casorio, e1 hombre por su parte y según la costumbre del lugar o posibilidades económicas, cubrirá este valor con dinero en efectivo, propiedades u otras prendas de vestir o mobiliario para la vivienda. Este documento es esencial para el estudio de la indumentaria, ya que tiene la ventaja de traer siempre valoradas todas las prendas por separado, su valor es el actual de dicho momento, ya que lo usual es que se trate de prendas a estrenar, y además siempre son prendas de moda dentro de la escala social de la propietaria.

En él se suelen incluir datos de gran interés, el tejido empleado para la confección, el color del tejido y las guarniciones que se le añaden. En ciertas ocasiones se hace mención a algunos detalles referentes a las modas.

Como dicho documento hace siempre referencia a la profesión de los otorgantes, no será dificil el detectar la mayor o menor utilización de una prenda, tejido o color entre una determinada esfera social.

Para localizar este tipo de documento solo tendremos que buscar en cualquier archivo de protocolos notariales de los muchos existentes en el territorio español. Existen gran cantidad de ellos en el Archivo Histórico de Protocolos de Madrid, en el Archivo Histórico Nacional, en el de Simancas. En Valencia entre los archivos de la Diputación, del Reino de Valencia y del Colegio del Patriarca, existen incontables de ellos que se inician en el siglo XIII.

El escribano solía transcribir este documento de otro que le proporcionaban los otorgantes llamado JUSTIPRECIO, que era redactado siempre por uno o dos expertos tasadores profesionales, generalmente pertenecientes a los gremios de sastres o tejedores. Quedaba siempre la copia del dote para los otorgantes y éstas es usual encontrar1as entre papeles notariales familiares.

2° LOS INVENTARIOS DE BIENES. Este documento se producía generalmente a la muerte propietario, sobre él después se producía la división de bienes entre los herederos.

El documento relaciona todo tipo de propiedades que pertenecían, al difunto como ropas, aperos de la labranza o las herramientas propias del oficio artesanal que desarrollaba, mobiliario de las casas, tierras, casas, cuadros, libros e incluso dinero en efectivo.

Este documento además de ser muy interesante para el estudio de la indumentaria, lo es también para saber la distribución de la casa con sus habitaciones, corrales y su contenido, porque en él se describe minuciosamente tanto el contenido como el continente. Otros detalles interesantes son algunas de las cosechas que se producen en las tierras y los animales de corral.

El justiprecio de este documento tiene el inconveniente de estar valorado según el estado de deterioro o desgaste. Otro inconveniente que encontramos en este documento es que en algunas ocasiones son prendas pasadas ya de moda que pueden ser heredadas de varias generaciones. Como el anterior lo encontraremos entre los protocolos de los escribanos.

3°.  ALMONEDAS DE BIENES. Documento que suele producirse después de las divisiones de bienes, consiste en una venta-subasta de los bienes muebles que los herederos no querían reservarse para si. En muchas ocasiones encontramos este documento en los protocolos de los escribanos, pero también es usual encontrarlos en los registros de entidades de tipo benéfico, como hospitales e iglesias.

4°.  TESTAMENTOS. Documento que se realiza en vida del propietario y que refleja por lo general muchas las posesiones, pero que a efectos del estudio de la indumentaria, resulta menos interesante, ya que en este solo aparece cuando alguna prenda, debido a su valor económico o sentimental, se quiere que vaya a parar a manos de una determinada persona. En estos casos en muy usual que aparezcan como destinatarios las iglesias, conventos o imágenes de devoción.

5°.  LIBROS DE INGRESOS DE ENFERMOS EN LOS HOSPITALES. En los hospitales generales de las poblaciones importantes se registran en un libro los ingresos de enfermos con detalle de la ropa que presentan en el momento del ingreso, para que después a la salida le sea devue1ta, o en caso de fallecimiento les era devuelta esta a los familiares, o si estos no las reclamaban era vendida en almoneda pública.

Este tipo de libros, son muy interesantes para el estudio de la indumentaria, ya que además de dar todos los detalles usuales de calidad y color, permite conocer las combinaciones de las prendas, de los colores, superposición de unas prendas sobre otras y en que fechas son utilizadas usualmente. El mayor interés de este documento es que nos muestra como vestía la gente verdaderamente pobre.

A manera de anécdota, en uno de los documentos por mi estudiados, al describir una capa decía que "está en bastante buen estado, solo tiene dos agujero de a palmo".

6°. LIBROS DE TOMA E DATTA DE LOS HOSPITALES. Libro equivalente a los actuales libros de caja, que no ofrece muchos datos para la indumentaria normal, porque las referencias a esta son de compras generales de tejidos, zapatos, confecciones y otros detalles, para hacer trajes de uniformidad para los locos y los "borts"(niños abandonados). No obstante, ofrece el interés de damos precios de todas estas prendas en cuanto a botones, pasamanerías, tejidos y mano de obra de sastres.

También ofrece la posibilidad de estudio comparativo de salarios, ya que refleja todos los que se pongan a albañiles, médicos, carreteros, de cargas de leña, y otros.

7°. CRIDAS PARA BUSQUEDA DE DELINCUENTES O ESCAPADOS DE CARCELES. Especie de búsqueda y captura que se repartía a manera de fotografía descriptiva para que se pudiese reconocer a maleantes o escapados de las cárceles. En este documento, se detallan todas las ropas con mucha minuciosidad, así como si el sujeto tiene algún otro detalle por el que puede ser reconocido.

8°.  ORDENANZAS DE OFICIOS GREMIALES. En ellos se reglamenta, como deben de tejerse las telas, como devanar o torcer las fibras textiles, como se les da color, como deben coserse las prendas, como deben construirse las joyas, zapatos, etc. Estos documentos se pueden completar con tratados para la instrucción de los maestros del gremio con exámenes (especialmente en el caso de joyeros) y con algunas pragmáticas reales que hacen referencia a estos Oficios, franquicias, premios y otros. También son interesantes dentro de la documentación gremial, los contratos de los maestros con los aprendices, ya que debían de proporcionarles ropa para su vestido y en el documento en algunos casos se describe ampliamente.

9°.  DESCRIPCIONES EN LA LITERATURA. Entre ellas suelen resultar muy interesantes los relatos de los viajeros, sobre todo de los extranjeros a los que todo les suele resultar interesante haciendo buenas descripciones de lo que ven. También en novelas, romances, descripción de fiestas y otros actos encontrará el investigador indumentarista datos de mucho interés. Los autores clásicos, también aportan muchísima documentación sobre el tema.

10.  PINTURAS Y DIBUJOS. Muy interesante y bonito puede resultar el estudio de las ropas que suelen aparecer pintadas al óleo, aunque en la pintura al óleo casi siempre se representa a personas importantes y la gente humilde solo aparece en casos excepcionales. Dentro de este apartado son especialmente interesantes los exvotos, depositados estos en ermitas y camarines de iglesias, hacen referencia a hechos milagrosos. Por desgracia la inmensa mayoría de de los santuarios y ermitas han hecho limpiezas y los han tirado, sin tener en cuenta su gran valor documental.

Los grabados (especialmente los de colecciones de trajes o aucas de mercados y oficios), los retablos de cerámica, en ilustraciones de libros etc. Es posiblemente la única manera que tenemos de la observación de muchas de las prendas que nos aparecen relacionadas o descritas en los otros documentos estudiados con anterioridad.

11.- OBSERVACIÓN DIRECTA DE LAS PRENDAS. Este es uno de los puntos principales sobre el que la mayoría de los investigadores, basamos nuestros estudios. Pero esto es problemático ya que si bien es esencial por poderse observar como eran realmente todos los detalles de tejidos confección y otros también es muy cierto que el hecho de poder tener en nuestras manos una prenda antigua no quiere decir que podemos saber su procedencia, la fecha de su confección y otros detalles que son indispensables para conocer la historia del traje.

El grave problema de la observación directa es que son muy pocas las prendas originales antiguas conservadas con anterioridad al siglo XIX, insuficientes las de la primera mitad de dicho siglo y muchas pero innecesarias por su cercanía las posteriores.

12. - AVISOS DE PERIODICOS. En las grandes ciudades se publicaban periódicos, que normalmente tenían una sección destinada a los avisos, que normalmente consistían en informar de compraventas, novedades, textiles y pérdidas de joyas, a cuya entrega por parte de quien las encontrara, se ofrecía una gratificación.

13. FOTOGRAFIAS. Aunque por desgracia la fotografía podía haber sido el mejor medio para plasmar la manera de vestir de nuestros antepasados, tiene el gran problema de que su invención viene a coincidir con la desaparición del traje tradicional. Además las primeras fotografías fueron para captar imágenes de gente importante, o gente vestida a la moda de la época y no tipos populares, cosa que no se hizo hasta pasados uno años. Incluso los primero fotógrafos como es el caso de Laurent, se advierte que claramente se ha vestido a gente para realizar la fotografía, cuando ya no vestían así.

14.- LA TRANSMISION ORAL. He dejado este punto para el último lugar porque a pesar que la mayoría de los estudiosos del folclore la consideran de gran importancia en sus estudios en el presente caso no debe ser así ya que plantea serios problemas para el indumentarista. Se debe tener en cuenta que las personas hoy vivas difícilmente recuerdan datos anteriores de más de 70 años y en cuanto que se sobrepase estos 70 años, toda la información nos puede llegar deteriorada y muy confusa. Por lo tanto nada fiable.



Transcripción de una carta de dote de mi Archivo Particular.


En el nombre de Dios todo poderoso. Sepasse por esta carta de Constitución y recibo de dote y manda de Arras como nosotros Lorenzo Taverner, labrador del lugar de Aldaya de parte unas y Joseph Assensi tambien labrador de dicho lugar, mancebo hijo de Juan Assensi, ya difunto y de Maria Martinez, legitimos consortes, en seguida del matrimonio que yo Loerenzo Taverner tengo tratado y ajustado en faz de la Santa Madre Iglesia de Maria Taverner doncella, mi hija legitima y natural y de Josepha Sanchis mi consorte con el referido Joseph Asensi labrador deste fin y enaxenación delo tratado ledoy y constituyo en Dote dela dicha Maria Taverner doncella mi hija la cantidad de ciento dieciocho libras y tres sueldos moneda de este Reyno, en los bienes y ropas de lino, seda y lana que son los siguientes=Primeramente enprecio y estimación de dos libras y dieciséis sueldos una Arca de madera de pino, con su llave y serraja =otrosi en precio y estimación de diez libras seis sueldos una Basquiña de pelo de fiebre negra =otrosi en precio y estimación de tres libras un jubón de damasco negro =otrosi en precio y estimación de seis libras un manto yladillo y seda =otrosi en precio y estimación de siete libras y diez sueldos una basquiña de Yladillo negro =otrosi en precio y estimación de dos libras y quatro sueldos un jubón de estameña del Principe = otrosi en precio y estimación de ocho libras un guardapies de Yladillo verde con un galón de seda = otrosi en precio y estimación de once libras otro guardapies de Yladillo y Almucar, su color azul con randa de bola =otrosi en precio y estimación de cinco libras otro guardapies de Yladillo verde con farfalanes de color de Archote =otrosi en precio y estimación de una libra un justillo de Yladillo verde guarnecido de galón de seda =otrosi en precio y estimación de nueve sueldos un pañuelo de seda de colores =otrosi en precio y estimación de tres libras diez sueldos un cubre cama y delante cama de Ylo y lana su color azul y encarnado con su franja =otrosi en precio y estimación de una libra y dos sueldos un ante puerta de Ylo y lana, su color azul y nacar =en precio y estimación de tres libras quatro sueldos tres delantales, los dos de Yladillo verde y negro, y el otro de tafetán negro =otrosi en precio y estimación de una libra diez palmos de manil de Ylo y lana, su color amarillo y encarnado =otrosi en precio y estimación de dos libras una mantilla de vayeta blanca =en precio y estimación de nueve libras quatro sabanas de lienzo de cassa = otrosi en precio y estimación de nueve libras y dose sueldos seis camissas de lienzo de cassa guarnecidas con encaxes =otrosi en precio y estimación de cinco libras y diez sueldos, dos camissas de lienzo delgado de botica guarnecidas con encaxes =otrosi en precio y estimación de una libra otra camissa de lienzo delgado usada = otrosi en precio y estimación de tres libras una pieza de servilletas de Ylo y algodón = otrosi en precio y estimación de una libra unos manteles para la sesta =otrosi en precio y estimación de dos libras dos sueldos siete varas de manteles con cordoncillo blanco de Ylo de cassa =otrosi en precio y estimación de una libra dos toallas de clavo para las manos de Ylo de cassa = otrosi en precio y estimación de una libra y seis sueldos unos manteles alamandeses de bufete =otrosi en precio y estimación de una libra y seis sueldos dos juegos de fundas de almoadas, o cabeceras de lienzo de cassa = otrosi en precio y estimación de una libra y quatro sueldos otro juego de cabeceras de lienzo delgado de botica =otrosi en precio y estimación de una toalla de lienzo delgado de botica guarnecida con encaxes en valor de dos libras =otrosi en precio y estimación de dos libras y ocho sueldos dos enaguas blancas de lienzo de cassa = otrosi en precio y estimación de seis sueldos un pañuelo de lienzo delgado =otrosi en precio y estimación de diez libras unos pendientes de perlas finas = que todas las partidas juntas a una suma reducidas importan las dichas ciento dieciocho libras tres sueldos, todo loqual ha sido justipreciado por peritos neutrales personas de comun acuerdo de las partes. De todos los quales bienes por real y corporal entrego de ellos, yo dicho Lorenzo Taverner hago transpasso para pleno y absoluto dominio al dicho Joseph Assensi, con todos los derechos y acciones que en cualquier manera me competan y tocar puedan, y ofresco tener y haver por firme la presente constitución dotal, para lo qual obligo mi persona y bienes habidos y por haber. E yo el dicho Joseph Assensi que presente soy, y en presencia de la dicha Maria Martinez mi madre y de expresso consentimiento de esta accepto de la dicha Maria Taverner doncella por mi legitima consorte en lo esdevenidero juntamente con la dicha dote constituyda la qual, confieso haver recibido según y en la forma que arriba va expresado. Por lo que remuneradas las acepciones del drecho otorgo carta de pago al dicho Lorenzo Taverner de la dicha dote constituyda y la retengo en mi poder como propio caudal de la dicha Maria Taverner doncella, mi futura consorte a quen tengo por razón de su virginidad, persona y linage la hago donación propter nupcias en nombre de arras en quantia de veinte libras moneda valenciana, y me obligo a que la susodicha cantidad de la dote y arras la tendré siempre promta sobre lo mas bienprado de mis bienes derechos y acciones que tengo y me pertenecieren en adelante y todo lo hipoteco expresamente y prometo no disiparles, ni obligarles a deudas mias y si lo executare asi quiero que no valga en lo que los dichos bienes que obligare valiere de la referida dote y arras y sin aguardar a la dilación del drecho prometo a la susodicha Maria Taverner a sus herederos, y a quien sudrecho representare pagar la dicha cantidad de la dote y arras, siempre que suceda la restitución de aquella por muerte, divorcio, o otros cualesquier cassos de los permitidos por drecho, y quieroseme executecon la presente escritura y su juramento que le difiero, para lo qual obligo mi persona y bienes havidos y por haver y hallandose presente la dicha Maria Martinez su madre se obligó con todos sus bienes en defecto de los de su hijo arestituir dicha dote y arras siempre que viniese al casso de restitución de aquella. Y ambas partes cada una por lo que asi toca cumplir damos poder a los justicias y juezes de su Magestad de cualesquier partes que sean acuya jurisdicción nos sometemos con nuestros bienes y renumeramos nuestro domicilio y fuero, y otra que de nuevo ganaremos, y si la ley siconvenerit de jurisdictione omnisum judicorum, y la ultima pragmatica de las sumisiones y demás leyes o fueros de nuestro favor y de la General del drecho en forma para que a ello nos apremien como por sentencia passada en cossa juzgada y por nosotros consentida. Y en fé otorgamos la presente en el dicho lugar de Aldaya, a los treinta dias del mes de Diziembre de mil setecientos veintisiete años.Y los otorgantes a quiene yo el escribano conosco no firmaron por no saber escribir según dixeron, como ni tampoco los testigos por la misma razón que lo fueron Vicente Sanchis y Joseph Hernandez labradores vecinos del dicho lugar de Aldaya. Doy fé = Antemi Valero Martinez.


No hay comentarios:

Publicar un comentario